Rodobaldo Martínez Pérez
rodo@enet.cu
Excepto el cambio yanqui de sustituir su voto en
contra por una abstención, a la hora de pronunciarse con respecto al bloqueo de
su país, al nuestro, por más de 50 años, poco ha trasformado ese engendro
arcaico.
Lo anterior sucedió ente miércoles en la asamblea
general de la ONU, cuando después de analizar por 25 veces el documento cubano “Necesidad
de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados
Unidos”, 191 países estuvieron a favor (rotunda victoria) y, por primera vez,
el gobierno norteamericano y su aliado Israel encendieron la luz amarilla y se
abstuvieron.
Tal postura acerca mucho más su discurso a su
acción, aun cuando sea una posición ambigua, porque es llamativo que el
presidente del Norte califique el cerco de política obsoleta, inútil y fracasada y, por otro lado, contribuya a afianzarla.
En su discurso el canciller de la Isla Bruno Rodríguez
demostró con varios ejemplos la existencia de ese acto criminal al señalar: “La
empresa estadounidense Medtronic no pudo establecer contratos con empresas
cubanas para la venta de estimuladores cerebrales profundos, que servirían para
el tratamiento de los pacientes cubanos con enfermedad de Parkinson y otros
trastornos neurológicos, alegando muy recientemente las restricciones del
bloqueo.
“Tampoco le fue posible a la multinacional SIGMA ALDRICH proveer los medios
de protección y productos químicos y biotecnológicos solicitados por la empresa
cubana FARMACUBA, para la elaboración de medicamentos en el país.“En mayo de este año, la Comisión Regulatoria Nuclear de los Estados Unidos notificó a la sucursal en ese país de la compañía alemana Eckert and Ziegler, que se denegaría la solicitud de licencia para proveer a la compañía holandesa Philips, la fuente de calibración para un equipo médico adquirido por el Instituto de Oncología de Cuba en 2013, afectando un servicio vital para pacientes con cáncer.
“El pasado 26 de septiembre, el proveedor italiano de equipos médicos EMILDUE notificó a la empresa cubana MEDICUBA que la compañía estadounidense Boston Scientific Corporation (BSC), se negaba a venderle un generador de radiofrecuencia marca COSMAN, para el diagnóstico de cáncer”.
Entonces, quienes dicen que el bloqueo no existe
demuestran una total ignorancia, porque aun cuando se anuncie una medida esta
no se cumple como la realizada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos
de permitir a Cuba utilizar el dólar estadounidense en sus transacciones
internacionales, cuestión aún sin realizar.
Para nadie es un secreto que el bloqueo se una
madeja difícil de desenredar por las implicaciones dadas al Congreso, el Presidente no tiene potestad para
eliminarlo, pero si tiene facultades en aras de irlo vaciando y no las usas.
Obama pasará a la historia como el mandatario de
mayor avance en las relaciones EE. UU-Cuba, pero, también, la Administración de
más persecución financiera a los negocios cubanos en nombre de su embargo.
La postura yanqui en la ONU fue promisoria, pero hay
que decir como Bruno: “Tenemos la esperanza de que se refleje en la realidad”.